Mascarilla facial con arcilla verde y aceite de coco para pieles secas con granitos.
Mascarilla facial de arcilla verde, aceite de árbol de té y aceite de coco: pieles secas y sensibles con granito.
Ingredientes:
- 1 cucharada (sopera) de arcilla verde.
- 3 o 4 gotas de Aceite de Árbol de Té.
- 1 cucharita (de postre) de Aceite de Coco Orgánico Bioselva.
- Agua.
- Evita utensilios de plástico o de metal
El poder absorbente de la arcilla hace que las partículas plásticas y metálicas pasen a la arcilla verde y por tanto a tu mascarilla y a tu piel. Usa siempre que puedas utensilios de barro cocido, de madera y de cristal.
Propiedades Arcilla Verde
Tiene la capacidad de absorber y regular el exceso de grasa y eliminar las toxinas e impurezas, por lo que está especialmente recomendada para pieles grasas, mixtas y con tendencia acnéica.
Es rica en micronutrientes, aportando a la piel minerales y oligoelementos consiguiendo revitalizar la piel y estimular la renovación celular, por lo que también puede ser adecuada para las pieles fatigadas y envejecidas.
Es antiséptica, cicatrizante y calmante, por lo que resulta adecuada para pieles con poros abiertos.
Propiedades Aceite Árbol del Té.
Tiene propiedades anti-bacterianas, anti-microbianas, anti-virales, anti-hongos, anti-sépticas y propiedades anti-inflamatorias que ayudan a aliviar la picazón, enrojecimiento y sensación de ardor en la piel.
Propiedades Aceite de Coco
En el tratamiento del acné, el aceite de coco tiene un papel fundamental porque está formado por: ácido caprico y ácido laúrico son agentes antimicrobianos que reemplazan la barrera protectora de la piel que se elimina mediante el aseo diario de la persona por lo que sin infección microbiana no se puede desarrollar el acné; la vitamina e mantiene la piel sana, garantiza el funcionamiento apropiado de las glándulas sebáceas y despeja la obstrucción; y antiinflamatorio, reduce la inflamación del acné.
Usándolo junto a una crema o sérum antienvejecimiento mezclando en la palma de tu mano un poco de crema habitual y un poco de aceite de coco, después aplicarlo sobre el rostro. Gracias a sus ácidos grasos esenciales y vitaminas es un gran aliado contra las arrugas.
Como crema hidratante facial usando un poco de aceite de coco calentándolo con los dedos y aplicarlo directamente en la cara haciendo un pequeño masaje conseguirás la hidratación de las pieles faciales más secas. Este producto es de rápida absorción, de modo que penetra fácilmente en la piel y humecta todas las capas dérmicas.
Como exfoliante corporal o facial casero, para ello calentar al baño maría aceite de coco con azúcar (o sal lo que prefiráis pero será el doble que de aceite de coco) hasta que se derrita y se mezcle todo, y ya tienes tu exfoliante casero. Limpian la piel en profundidad y elimina las células muertas que se acumulan día tras día, realizarlo una vez a la semana.